"Con eso basta. Estamos mirando la misma luna del mismo mundo. Estamos ligados a la realidad por la misma línea. Seguro. Sólo tengo que ir tirando de ella en silencio."

(Sputnik, mi amor - Haruki Murakami)


martes, 6 de abril de 2010

Sin noticias de Gurb


Siempre tuve curiosidad por leer este libro, no sé por qué tenía la impresión de que era el típico libro que se manda leer en el instituto, y tras haberlo leído no me extraña nada, porque es perfecto para cogerle el gusto a esto de los libros.

Y claro, cuando me enteré que el escritor era Eduardo Mendoza fue lo que definitivamente me hizo ir derecha a la librería en su busca. Será uno de sus pocos libros que no esté en edición de bolsillo, por lo que nunca lo había visto expuesto, y nunca encontré la casualidad de elegirlo. Como comenté cuando leí "El misterio de la cripta embrujada" tengo más libros suyos en la recámara, pero adelanté éste a la lista de espera por la curiosidad esa de la que hablaba.

En un principio, este libro era una publicación por entregas en el periódico El País a principios de los noventa y que finalmente el autor decidió transformar en un libro.

Es tan ameno y se lee tan rápido que no quiero ni contar una línea del libro para no desvelar ningún detalle. Pero sin duda la ironía llevada al absurdo esconde tras de sí una crítica a la sociedad actual, en mi opinión, totalmente acertada.

Definitivamente me he enganchado a la literatura de Eduardo Mendoza.

3 comentarios:

Isi dijo...

Ayyy sigo cotilleando por tu blog y me encuentro con este libro!! Me lo habían recomendado infinidad de veces y nada, no lo leía porque el título no me decía nada (y nada es decir ya mucho!), pero un buen día lo saqué de la bibioteca y me morí. De la risa.

También soy de las que lo recomiendo, es que no tiene desperdicio, jejeje.

Samara dijo...

¿Pues has leído el Asombroso viaje de Pomponio Flato? Super divertido! Para mí mucho mejor que Sin noticias de Gurb. Si no lo has leído te lo recomiendo. Te vas a reir un montón! :D

Isi dijo...

Pues me lo apunto, que no lo he leído! faltaría más.