"Con eso basta. Estamos mirando la misma luna del mismo mundo. Estamos ligados a la realidad por la misma línea. Seguro. Sólo tengo que ir tirando de ella en silencio."

(Sputnik, mi amor - Haruki Murakami)


jueves, 25 de noviembre de 2010

Ana María Matute, Premio Cervantes



Tengo éste, mi rinconcito, un poco abandonado últimamente, así como los blogs que leo. Hasta los libros los tengo un poco alejados de mí estos días, nunca olvidados. Sin embargo, no podía quedarme sin dedicarle unas líneas desde aquí a Ana María Matute. Supongo que una infinidad de blogs lo harán y que no diré nada nuevo, pero más que en la obligación me siento en la necesidad de felicitarle por este premio tan merecidísimo. Ana María Matute, Premio Cervantes. Al fin. Enhorabuena. Grande. Muy grande. Y cabe destacar, que es la tercera mujer en 36 años en obtenerlo, un dato cuanto menos curioso, cada cual que llegue a sus conclusiones. Pero desde ayer Ana María Matute en los libros de historia un poco más eterna.

Y desde aquí confieso que por desgracia no la he leído nunca, pero sin duda alguna lo haré. He escuchado varias entrevistas suyas. ¡Y qué mujer! Sin duda alguna tiene el don de la palabra y es todo un placer escucharla. No logro entender como ninguno de sus libros ha caído todavía en mis manos, y me da cierta pena que sea por un premio otorgado por lo que empiece a reconocerle lo que por derecho, estoy segura, le pertenece, toda mi admiración. A pesar de ello, tengo una cosa clara, no me hace falta leer sus libros para entenderlo. Ana María Matute es una de esas personas. Mágica.

Aquí os dejo un link a esta pequeña joya de entrevista que le hizo Lucía Etxebarria, una de mis escritoras fetiche, a Ana María en el programa Carta Blanca, y que merece la pena escuchar de principio a fin. Yo me quedo con la frase “Fíjate, a los 80 años con proyectos todavía...”. De nuevo, que grande. Y que sea por mucho tiempo. Siempre he pensado que de nuestros mayores es de quién más podemos aprender en esta vida. Me reafirmo, sólo hace falta escucharla.


Este premio quizás sea el mejor reconocimiento a su trabajo. Y si hace que lectoras tan despistadas como yo, comiencen a valorarla como merece, bienvenido sea. Ayer tras conocer el resultado, Ana María dijo: “Puedo decir en estos momentos sin ninguna duda, que soy feliz”. Enhorabuena Ana María, probablemente nunca un premio fue tan merecido.